jueves, 20 de noviembre de 2008

UNA DE CAL Y OTRA DE ARENA

El Museo de la Revolución y mis sentimientos
Poco a poco mi estado de ánimo fue cambiando, yo deseaba conocer La Habana, ansiaba saber un poco de Cuba, pero lo único que recibía era propaganda oficial. Es cierto que se admiraba a los héroes de la Revolución y estos recibían homenaje de su pueblo; pero ¿Eso era lo que yo buscaba? Internamente me respondí que no había ido a ver fotografías ni la Historia de luchas intestinas que ya llevaba varias décadas. El pueblo cubano era toda su gente, la de antes y la actual. El sufrimiento se podía palpar a cada paso, me pedían caramelos para endulzar la leche de los niños, papel y lapiceras para poder escribir, dentífrico y jabón para el aseo. No eran mendigos, no era gente desocupada, como había podido ver en distintos países, incluso en el mío. Eran seres humanos trabajadores, íntegros, sacrificados, que se veían imposibilitados de tener lo necesario para seguir adelante. Temerosos de ser vistos por el personal de vigilancia que podía denunciarlos, susurraban y escapaban rápidamente ante el menor síntoma de que alguien pudiese culparlos de algo.
En medio de ese sentimiento de rabia e impotencia que me embargaba, llegamos al antiguo Palacio de Gobierno, cuya construcción databa de 1920, actualmente Museo de la Revolución… Y entonces más de lo mismo. Una construcción antigua, maravillosa, la arquitectura sublime, los techos y columnas con ornamentos de increíble belleza; y en incongruencia total, muestrarios de armas, y recuerdos, que resultaban dolorosos haciendo apología de la violencia; aunque hubiese habido razones fundadas para ello.
Nuestra sorpresa nos dejó callados, hasta que pregunté el porqué de todo esto. Quizás si este edificio hubiese sido usado en forma diferente, con eso se hubiese podido alimentar a miles de cubanos que carecían de cosas imprescindibles. El guía, sinceramente molesto, respondió que los héroes de la Revolución merecían ese homenaje, y de hecho no alcanzaría para subsanar problemas que no eran culpa del País ni de su pueblo, sino del bloqueo injusto que los estaba perjudicando. Recibí un codazo de un compañero de excursión, que me susurró ¡callate! Y el resto del recorrido lo hice en silencio.
El paseo había sido curioso, las cosas que había aprendido eran muchas, sin embargo nuevamente me quedaba un sabor amargo y las ganas de expresar mi protesta. ¿Qué podía hacer yo, una simple turista? Solo mirar y escuchar, lo demás era actuar como lo que hacían tantas personas que sabían y se encogían de hombros; pero yo me negaba interiormente a hacer lo mismo.

Conociendo a los cubanos
Salí a la calle y me separé del grupo, quería caminar; en la mochila guardaba la cámara y mi cuaderno de notas, un poco de dinero, agua mineral, y algunos artículos personales para higiene. No sacaba fotos, en la mano llevaba un plano de la ciudad y folletos, donde se indicaban los principales lugares y monumentos; pero yo tenía ganas de hablar con la gente, de escuchar ese dulce y cantarín sonido de la voz de los cubanos.
Deseaba conversar sin presiones, sin propaganda, sin otros recuerdos que no fueran los de la hermosa música y la vida simple de cualquier persona; aunque sabía que era improbable que pudiese ocurrir.
Quedé parada en una esquina, admirando los coches antiguos, de marcas que ya no se veían en otros lugares, motocicletas con sidecar preciosas, muchas bicicletas. En ese momento, un automóvil paró frente mío, y un moreno canoso y sonriente me preguntó respetuosamente si necesitaba movilidad. Sin pensarlo dos veces le dije que si; y antes que pudiera abrir la puerta trasera, me ubiqué a su lado. – Quiero conocer un poquito de la ciudad y luego escuchar música, pero lléveme a un lugar común para ustedes, no donde van los turistas. Al principio me miró sorprendido, luego de indicarle lo que deseaba, aceptó.
Conversamos mucho, no era de La Habana, aunque hacía años que vivía ahí. Me explicó algunas cosas; respondía mis preguntas y aclaraba preconceptos que yo guardaba dentro mío. El automóvil recorría diferentes lugares mientras él me contaba parte de su vida y cosas de la ciudad.
Me llamó la atención, una construcción blanca, bonita, con banderas y custodia. Le pregunté que edificio era; soltó una carcajada y respondió esa es la casa de las “jineteras” o las putas como dicen ustedes los argentinos. ¿Cómo dice? -Usted perdone, señorita; le explicaré… Es La Casa de Suiza, allí se siguen haciendo negocios entre Cuba y EEUU, por medio de ellos que hacen de intermediario. Eso no nos llega al común de la gente, pero hay dinero que sigue entrando por esas transacciones. Son cosas que Cuba produce y se exportan. ¿Donde conseguirían los yankees cigarros cubanos? ¡¡Solo en Cuba!! – dijo a modo de broma.
Paseamos un rato más, y dijo – la llevaré a escuchar música nuestra, ya verá que divertido es, iremos a un lugar seguro, es gente amiga.
Yo no sabía donde estaba, pero intuía que andábamos a buena distancia del lugar donde me alojaba. Me sentía a gusto con ese hombre mayor risueño y conversador, que me trataba cordial y respetuosamente.
A medida que seguíamos, las callecitas se veían más angostas, unos pequeños jugaban sentados en una vereda. Dejamos el automóvil y caminamos dos cuadras, hasta que llegamos.
Pintado prolijamente sobre la pared descascarada, estaba el nombre del lugar al que me llevaba, bajamos dos escalones y abrió la cortina de tiras plásticas.
Por fin! Acababa de entrar en el corazón de Cuba, era lo que había estado buscando.
Magui Montero
NOTA: Imágenes extraidas de internet
Imagen 1- Frente del Museo. Imagen 2- Detalle de la cúpula desde el interior

15 comentarios:

Juan Antonio dijo...

Magui

Me gustó mucho tu narración y descripción de la realidad en Cuba.
Lamentablemente aún no he estado en allí, pero mi hermana me contó que visitó algunas escuelas de la isla y que el "lavado de cerebro" a los niños era impresionante.
Bueno, no se podría esperar otra cosa de una dictadura.

Saludos.

Juan Antonio

Magui Montero dijo...

Hola Juan Antonio, muchas gracias por tu visita. Y tengo algo que acotarte, es cierto que muchos niños reciben información distorsionada, probablemente se los "obligue" a decir algunas cosas, pero hay algo que debemos tener en cuenta. Hay personas jóvenes, otros ya mayores, que vivieron distintas etapas y piensan diferente; solo que pertenecen momentáneamente a una multitud silenciosa, para poder seguir viviendo, como pueden dentro de su País.
Alguna vez, cuando Cuba vuelva a ser libre, cuando tengan la libertad de opinar, podremos saber quien está de uno u otro lado; por ahora, por su propia seguridad y la de su familia, lo adecuado para ellos es esperar. Lo más importante es que nadie, a través de los años, pudo matar su esperanza.
Un abrazo!
Magui

mares dijo...

Hola Magui, que gusto poder volver a visitarte. Estaba de trabajo hasta el moño!!! y sin tiempo para nada.
Bien, esa visión que trataron de venderte es la que tiene una buena parte de gente en el mundo. La misma del noticiero nacional de TV (el único practicamente, by the way) y la que le muestran a quienes nos visitan de cualquier ramo. Pero cuando sabes de verdad como se vive en Cuba, como es el día a día de los cubanos de a pie, que somos la mayoría, es muyyyyyyy diferente. Hay cosas que están muy pero muy mal en este país. Pero tienes razon tambien cuando dices que somos una multitud silenciosa, aquí nadie expersa libremente lo que siente, menos aún si difiere aunque sea mínimamente de la versión oficial. Sencillamente, puede ser problemático.
Y es que nos queda mucho por avanzar a los cubanos.
Besos desde la isla.

Magui Montero dijo...

Hola Mares!! Me gusta muchísimo leer tu opinión! porque siento que fui capaz de percibir aquello que trasciende lo meramente turístico. He tenido oportunidad de conocer gente de la isla y tengo un especial afecto por aquellos que me abrieron las puertas de su casa y de su corazón.
Un abrazo muyyyy grande!
Magui

PD: Alguna vez, si Dios lo permite, iré a tomar ese rico café que me ofreciste... (o quizás yo pueda tener la oportunidad de invitarte algunos mates en el living de mi casa...)

roxana dijo...

que linda recorrida por Cuba! Estuve alli , La Habana me encantó , pero no es facil, como decis, descubrirla.
pero cuando la descubrís GUAU!!!!
Quisiera invitarte a ver mi blog. mujeresdescosidas.blogspot.com.
Si tenes ganas y tiempo, podemos cruzar información y conocimiento. Un saludo
Roxana... y estoy de acuerdo con las palabras de Magui

Magui Montero dijo...

Muchas gracias por la visita Roxy! He tratado de reflejar con honestidad, no solo las cosas que veía sino también como me sentía ante cada situación. Un abrazo grande.
Magui

roxana dijo...

Magui Gracias por entrar al blog y leerlo, y hacerte seguidora. Viste que estamos en una misma onda! u ola mejor dicho. Seguimos enlazadas. Divino tener nietoas no? Me encantarìa, pero se que todavia me falta un tiempito. Un abrazo calido Roxana

SHE dijo...

Hola Magui aki visitandote y leyendo la descripciòn exacta de lo que uno como turista vivie en cuba y mira que eras mujer ,no sabes la de chicas que se prostituyen con el afàn de que un hombre de otro paìs las saque de Cuba, una triste realidad que sòlo se conoce cuando lo vives de primera mano..
lindo viaje y una real visiòn la tuya!

Magui Montero dijo...

Hola She! Lo sé, conozco también eso... Es sumamente penoso, pero muchas veces la desesperación te lleva a hacer ciertas cosas que no son reprochables, cuando comprendes los motivos. Por eso en mis posteos trato de ser cautelosa. Estoy enfocada en mostrar lo que me tocó vivir, bueno y malo, triste y bonito. Con el deseo de que puedan ir conociendo una realidad, pero simultáneamente sin lastimar a quienes tratan de sobrevivir de la forma que pueden.
Sé que me demoro en transcribir lo que guardo en mis cuadernos, pero voy analizando cada cosa, antes de hacerla pública. También podrás observar que no incluyo nombres; no sé si sea necesario, pero cuidaré a quienes confiaron en mi.
Un abrazo grande!!
Magui

mares dijo...

Para SHE que habla de las chicas cubanas que se prostituyen, podría decirte que las he conocido igual de mas de un lugar fuera de Cuba. Que además, es un desafortunado e injusto estigma que nos han colgado a las mujeres cubanas porque este país está lleno de mujeres honestas y valientes que se levantan a trabajar cada día aun cuando la retribución por esto no alcance para mantenernos a nosotras o a nuestros hijos.
Mi respeto para quien elija este camino que Ud menciona, pues como bien dice Magui, la desesperación puede llevarte a cualquier cosa y hay que conocer cada historia en particular y las razones que llevan a obrar de una manera u otra.

Saludos de una cubana que salió mas de una vez de Cuba y escribe hoy desde ella. Y que conste que no soy de la pequeña minoría privilegiada que entra y sale cada vez que quiere.

mares dijo...

Amiga Magui, por supuesto que acepto tu invitación a tomar mate!!
Ten por seguro que si vuelvo a tener la posibilidad de pisar tu tierra argentina, el living de tu casa será uno de los infaltables.
Igual, y aunque esté de más decirlo, las puertas de mi casa siguen abiertas y esperandote.

Un besote.

Magui Montero dijo...

Hola Mares! Quiero tratar de interpretar a mis dos amigas y si me permiten, equilibrar las cosas. La opinión de She, (creo entender) que se refirió, no a juzgar a la mujer cubana, sino a que en ciertas oportunidades, algunas usan este recurso, buscando una opción que les ayude a salir del país en forma permanente.
De todas formas, tu defensa de la mujer cubana, es totalmente válida y estoy de acuerdo con ello Mares.
Hay personas (tanto hombres como mujeres) que se dedican a ejercer la más vieja de las profesiones en diferentes lugares del mundo. Pero no significa un "estigma" para quienes sean jineteras en Cuba ni quienes estén en otros paises. No corresponde a ninguna persona el juzgar, pues cada uno elige su vida y su camino de acuerdo a al propio criterio y posibilidades que tenga.
Te mando un fuerte abrazo!! y te reitero la invitación a mi humilde hogar. Besotes!!!
Magui

Magui Montero dijo...

Continuo...
Por supuesto que mi mayor respeto y admiración a la mujer cubana (y de cualquier lugar del mundo) que trabaja y se sacrifica de sol a sol para llevar honradamente el pan a su hogar.
Un abrazo y muchos besos que los abarquen a todos!

mares dijo...

Hola Magui, disculpa si no me explique claramente en mi comentario anterior. Tambien reconozco que soy un poco susceptible con ese tema, quizás porque me ha tocado un poco de cerca.
Mira, yo por lo general no acostumbro a criticar a las personas por hacer esto o aquello, puede que alguna vez no lo logre pero hago lo posible por evitarlo, y tanto respeto me merece quien se prostiuye por un fin, como quien lo hace porque está en su naturaleza o que se yo, como quien trabaja en cualquier otra cosa, pero creeme que a veces resulta molesto que nos señalen con un dedo y sea una de las primeras cosas que mencionen de mi pais, sin hablar tambien, o acaso no las vieron? de esas mujeres (tambien jóvenes y con posibilidad de buscarse quien la saque del país si se lo proponen)con rostro cansado y hasta entristecido saliendo a las tardes de sus trabajos y yendo a sus hogares con la familia. Es que somos hasta muchas mas que las otras y sin embargo muchas veces se miran las manchas mas que la luz del sol.
Sorry si me he extendido o si sin querer he terminando molestando a alguien pues no fue ni de lejos mi intención pero consideré necesario hacer una aclaración.
Un beso y el cariño de siempre.

Magui Montero dijo...

Querida Mares: A nadie molestaste! y puedes extenderte todo lo que desees! Si mi posteo sirve para que haya comentarios aclaratorios, y las personas opinen a su gusto es totalmente válido! No debes pedir disculpas por lo que es tu derecho!
Por otro lado tengo que decirte y es una cuestión ya sabida: Las noticias buenas no venden! (es algo que siempre se repite) Sabemos que en todos los paises existe gente honrada, sacrificada, decente, que cumple con sus obigaciones con alegría; pero te fijaste si ellos salen en la prensa o tienen espacios destacados?? Casi nunca!!! Son noticia los ladrones, los estafadores, las prostitutas. Por eso es que elegi comentar mi impresión sobre como fue estar en contacto con personas "comunes" de tu país.
Quedate tranquila! Lo tuyo fue perfectamente interpretado! y puedes escribir y extenderte todo lo que desees. Mi blog es el espacio de aquellos que deciden visitarme. Entonces, pues, a ponerse cómodos que para eso fue creado!!!
Magui